Recorrer la ruta 66 ha sido un sueño durante mucho tiempo. Siempre hablábamos de hacerla, pero nunca llegaba el momento y de pronto, en primavera de 2021 (en media pandemia), quedamos a tomar unas cervezas con unos amigos y voilá… Entre cervezas, Miguel Ángel dice que tiene muchas ganas de realizar la ruta; José Antonio se mete en internet simplemente para ver cómo están los precios de los vuelos. Y de repente: ¡LOTERIA!
El vuelo ida y vuelta a Chicago estaba por 259€/personal. ¿No me digáis que esto no es una lotería? Fue una ganga y no la podíamos dejar escapar. Asique saque mi tarjeta y grite: ¡compra!, ¡compra! Y así, entre cervezas, risas y sin saber bien que estábamos haciendo, decidimos que el 13 de septiembre de ese mismo año salíamos de viaje hacia la mítica ruta 66. Compramos el vuelo sin saber cuantos días se tarda en recorrer la ruta, ni lo que nos iba a costar, ni nada de nada. Solo teníamos claro que la ruta 66 empezaba en Chicago y terminaba en Los Ángeles.
Decidimos coger el vuelo por un mes, 🙈. ¡UN MES! sí ya sé, habían caído alguna cerveza de más. Pero esto nos permitió conocer otros Parque Naturales del país, repetir El Gran Cañón y Las Vegas y pasar unos días de relax en las playas de la costa oeste, al sur de Los Ángeles. ¡No hay mal que por bien no venga! Debido a la pandemia en septiembre aún EE.UU. no estaba abierto al turismo, por lo que Iberia nos cambió los vuelos para abril del 2022 sin ningún cargo adicional. Tuvimos, por tanto, casi un año para ir estudiando la ruta y prepararla a conciencia. En este post encontrarás todo lo que necesitas saber para realizar tu viaje de la forma más fácil y rápida: Alquiler de coche, planificación de etapas, cuando tiempo se necesita para recorrerla…
ÍNDICE
Datos básicos de la Ruta 66.
- Empieza en Chicago. Justamente en la calle Adams Str. encontrarás el cartel que indica el inicio de la Ruta 66.
- Termina en el muelle de Santa Mónica, Los Ángeles. Aquí también encontraremos un cartel que nos indica el fin de esta mítica ruta.
- Un poco de historia: Fue apodada la «Madre de las carreteras» (Mother Road) por el novelista John Steinbeck, en su novela «las uvas de la ira», cuyos protagonistas salían de su ciudad natal Oklahoma para atravesar el desierto de Arizona y llegar a «la tierra de las oportunidades», California. Se construyó en 1926 para unir las diferentes poblaciones entre los rascacielos de la ciudad de Chicago con las palmeras de Los Ángeles y fue la primera carretera en ser asfaltada de los EE. UU, aunque necesitó 12 años en ser pavimentada por completo.
Hoy en día es una ruta muy mitificada en Europa. Los propios americanos no la tienen en tanta consideración, por lo que no esperes encontrar grandes atractivos turísticos en ella. Es una ruta que te permitirá conocer en profundidad los Estados Unidos, llena de frikadas y cosas extravagantes. La verdad que fue una experiencia muy divertida, pero no esperes ni grandes monumentos, ni ciudades que te quiten el sueño. - Longitud: 3939 km ó 2448 millas desde Chicago a Los Ángeles.
- Duración: La ruta 66 se puede realizar en tan solo 11 días, pero conviene dedicar unos días al inicio para conocer la ciudad de Chicago y otros 2 o 3 días para conocer alguno de los principales Parques Nacionales cercanos a la carretera, un día para disfrutar de Las Vegas y, finalmente, otro par de días para visitar Los Ángeles y sus alrededores. Nosotros en total dedicamos 25 días para todo esto. Pero si no te vas a salir de lo que es la ruta 66 valdrían con 14 o 15 días, dejando un par de días al principio para conocer Chicago y un par de días al final para Los Ángeles.
- Por cuántos Estados pasa: Por ocho estados: Illinois, Missouri, un trocito de Kansas, Oklahoma, Texas, Nuevo México, Arizona y California.

Documentación necesaria:
- Para volar a los EEUU es necesario un pasaporte en regla con una vigencia de más de 6 meses y obtener la ESTA por Internet. La ESTA es una especia de visado y se obtiene pinchando aquí Formulario ESTA online. Se realiza online y tras pagar una tasa, a los pocos días, recibirás un e-mail con la aprobación. Tiene una vigencia de dos años.
- Oficialmente para conducir coche en EEUU es obligatorio tener el Carnet Internacional, aunque a nosotros en la práctica nunca nos lo ha pedido en EE.UU., por lo que no lo hicimos. De todos modos, el Carnet Internacional lo puedes solicitar online en la página oficial de la DGT, pinchando aquí obtendrás toda la información.
- Te recomiendo que te hagas con un buen plano del trazado original de la Ruta 66. Pues gran parte de la Ruta 66 ha desaparecido o permanece unida a la autovía, por lo que es bastante difícil seguir el trazado original. En este artículo te iré indicando en que casos no es tan recomendable seguir el trazado original y continuar directamente por la autopista.
- Hazte con un buen Pen drive de música que te inspire y te hagan recordar para siempre esta maravillosa aventura. Prepárate una lista de música donde no debe faltan canciones de Robert Johnson, Muddy Waters y BB King…
- Es importante que contrates un buen seguro de viaje con las coberturas necesarias. Ten en cuenta que la asistencia médica en Estados Unidos es especialmente cara. Los costes de una atención médica en este país pueden ser desorbitados. Recuerda que si tienes póliza de seguro privado, algunas compañías te incluyen asistencia en el extranjero. En este caso, llama a tu seguro y comprueba lo que te incluye.
- A la hora de reservar el vuelo, compara las tarifas llegando y regresando desde Chicago/Los Ángeles o entrando por una y saliendo por otra. Muchas veces es más barato reservar ida y vuelta desde la misma ciudad y luego tomar un vuelo interno Chicago-Los Ángeles. Como os comentaba más arriba, tuvimos una suerte increíble, conseguimos vuelo Madrid-Chicago-Madrid por 259€ y luego reservamos un vuelo interno Los Ángeles- Chicago por tan solo 120$.
¿Cómo alquilar coche para hacer Ruta 66?
A la hora de planificar la ruta 66 lo más importante es el alquiler del coche. Puede ser también lo más caro del viaje, pues el coche se toma en una ciudad y se devuelve en otra que está a más de 4.000km de distancia. Por lo que todas las compañías de alquiler cobran un extra bastante alto por dejar el coche en ciudad diferente a su recogida. Buscar vehículo para realizar la ruta 66 fue lo que más tiempo nos llevo. Estuvimos mirando una agencia y otra y otra y otra…. De hecho, al principio comenzamos buscando autocaravana, las famosas motorhome, pero los precios que encontrábamos nos hizo desistir. Terminamos alquilando una minivan para 6, que por cierto fue todo un acierto. La minivan da mucha más movilidad y permite entrar al centro de las ciudades, cosa que con una motorhome no se puede hacer.
IMPORTANTÍSIMO: Hay una cosa que se llama RELOCATION, esto es cuando una empresa necesita trasladar sus vehículos/caravanas de un punto a otro, es decir, moverlas entre sus bases. Esto permite alquilar una caravana o coche por 1$ al día, aunque hay que tener en cuenta, que en este tipo de ofertas, los kilómetros están limitados y los días de alquiler también. Esto fue lo que estuvimos mirando todo el tiempo. Todos los días chequeábamos las páginas que te voy a mostrar más abajo, pero no tuvimos suerte. Teníamos varios factores en contra: primero que no era temporada alta y segundo que acababa de terminar la pandemia y hacía poco tiempo que EE.UU había abierto a los turistas, por lo que aún no había demasiados fanáticos de la ruta en carretera. PARA ENCONTRAR BUEN PRECIO EN EL ALQUILER DE TU COCHE TE RECOMIENDO ESTAR PENDINTE DE ESTAS PÁGINAS:
Nosotros no tuvimos suerte con ellas. Pero buscando mucho encontramos una minivan en la página de booking (curioso, porque está página hasta ahora solo la había utilizado para reservar hoteles) que era de Los Ángeles y se encontraba en Chicago. Conseguimos, por tanto, un precio muy económico, ahorrándonos el extra que cobran por recoger en una ciudad y soltar en otra diferente. Minivan para 6 personas para 20 días recogiéndola en Chicago y soltándola en Los Ángeles por 758€, con el seguro a todo riesgo incluido. Como ves, es super importante mirar mucho y buscar en todas las páginas de alquiler. Con un poco de suerte puedes conseguir alquileres a muy buen precio, que es el gasto más importante de todo el viaje.

Recomendaciones para conducir por EE.UU.
- Adelantar por la derecha no sólo es legal sino que lo hace todo el mundo.
- Es legal (y obligatorio) girar a la derecha con el semáforo en rojo cuando haya una señal que lo indique.
- No aparques nunca delante de una boca de incendios (aunque no haya ninguna señal que lo prohíba) y asegúrate de las horas en las que puedes dejar el coche en la calle.
- Los peajes están indicados como toll o turnpike y no suelen tener barrera. No utilices nunca el carril de Fastrak. Algunos peajes se pueden pagar en efectivo, asique lleva siempre dinero encima. La mayoría de peajes debes pagarlo vía internet en la dirección específica de cada autopista, mencionando la matricula del auto y con los datos de la tarjeta de crédito.
- Si te para un policía, mantén las manos en el volante y al a vista en todo el momento.
- El tema de la gasolina no es un problema en la ruta 66, encontrarás gasolineras incluso en los pueblos más pequeños. Aunque no hay que confiarse y apurar el depósito.
¿Dónde dormir en la Ruta 66?
Los moteles de carretera son el alojamiento más económico que podrás encontrar. Hay una gran oferta de moteles, tanto dentro como fuera de todas las ciudades y pueblos por donde va pasando la Ruta 66. El precio por habitación oscila entre los 40 a los 120$ con dos King Size y, por tanto, capacidad para cuatro personas, por lo que si vais en grupo, como nosotros, os va a salir bastante bien de precio. La gran mayoría dispone de calentador de agua para el café o té, por tanto puedes ahorrar en el desayuno. En ciudades grandes, como Chicago o Los Ángeles, es necesario reservar con bastante antelación para conseguir el mejor precio. En cualquier caso, si sabes las fechas en las que estarás en una ciudad determinada conviene reservar cuanto antes por internet para asegurarte habitación y el precio más barato.

Algunos moteles cierran la recepción a partir de una hora determinada. Si vas a llegar algo tarde, conviene avisar e informarte bien si están toda la noche abierta o no. Hay varias cadenas como Motel 6, Super 8, Travelodge, Days Inn o Comfort Inn que tienen muy buena calidad / precio. Si finalmente decides realizar la ruta 66 en caravana, no creas que no vas a tener que pagar ninguna pernocta. Piensa que para poder estacionar la caravana de manera legal en las ciudades tendrás que hacerlo en los campings, incluso si quieres vaciar agua, etc, es necesario reservar plaza de camping. Precio de camping (campground) es de aproximadamente 20$.
Si has llegado hasta aquí, ya tienes toda la información básica para empezar esta mítica ruta. Pero continua leyendo para conocer con detalle cada etapa y conocer los lugares imprescindibles a visitar durante tu recorrido. Es un viaje maravilloso, lleno de vivencias únicas y que te permite conocer gran parte de los Estados Unidos.
CHICAGO
La ruta 66 empieza en la ciudad de los rascacielos, Chicago. Al sur de calle Adams Str se encuentra el cartel que da inicio a esta maravillosa e increíble carretera. Para salir de Chicago tendrás que recorrer los 2,5km de Adams Str hasta Orden Ave., girar a la izquierda y recorrer los barrios periféricos de Cicero y Berlín. En Harlem Ave, se tuerce a la izquierda (sur) y conduce hasta Joliet Rd donde comienza la I-55, la interestatal que lleva al sur.

Antes de comenzar tu camino hasta los Ángeles te recomiendo dedicar al menos un par de días a la ciudad de los rascacielos. Te dejo mi artículo de ¿Qué ver y hacer en Chicago? donde no solo te cuento todo aquello que no te puedes perder, sino, también, como moverte y como llegar del aeropuerto al centro de la ciudad. Chicago tiene mucho que ofrecer, es una ciudad fascinante que compite con Nueva York y con San Francisco en atracciones turísticas. Esta ciudad se puede conocer fácilmente a pie o en transporte público, por lo que conviene alquilar tu coche para el día que vas a salir de la ciudad.

Pasear por el Millenium Park, con sus opulentas y gigantescas esculturas, que te harán preguntarte por qué no puedes tener un parque así en tu ciudad. Admirar los rascacielos más famosos de The Loop y entrar en el interior de alguno de ellos para admirar sus bellezas. Realizar el paseo en barco de la arquitectura de Chicago. Navegar el lago Michigan. Observar la ciudad a más de 400 metros de altura… serán solo algunas de las cosas que no deberás dejar de hacer en tu estancia por la ciudad de los rascacielos.
Etapa 1: Chicago – Springfield
Dependiendo del tiempo del que dispongas para realizar este viaje podrás ir directamente hasta St Louis, ubicada a 500 km de Chicago o bien dividir la etapa en dos y dormir en Springfield. Springfield está a 326km de Chicago. Al ser el primer día encontrarás muchas cosas por el camino que te llamarán la atención y donde querrás parar a tomar una fotografía. Contando que, además, al ser el día que se recoge el coche y se pierde bastante tiempo en los trámites, merece la pena dividir la etapa en dos y tomarse el día con calma, como decidimos hacer nosotros, durmiendo en Springfield.

Este tramo es una de las etapas más famosas, pues se unen varias carreteras históricas, la 66 y la 61. Por lo general irás prácticamente todo el tiempo por la I-55, aunque en varias ocasiones podrás circular por la mítica 66 (una vía de servicio que va en algunos tramos en paralelo a la interestatal). En este día hay varias paradas que no debes perderte:
1. La primera parada que hicimos fue en el Teatro Rialto en Joliet, a una hora de Chicago. Merece la pena una breve parada para verlo por fuera y si se puede por dentro, es una auténtica maravilla. Cuando nosotros llegamos había un espectáculo de Pepa Pig para niños y pudimos ver un poquito su interior. Joliet también es la ciudad donde se rodó una de mis películas favoritas: «Granujas a todo Ritmo» (The Big Brothers). En ella se encuentra The Old Joliet Prison, que aparece en dicha película y en la serie de televisión “Prison Break”, la entrada es de pago y reservando con tiempo se puede hacer una visita guiada, para ello entra en su página oficial pinchando aquí.


2. Wilmington, donde podrás fotografiarte bajo el ‘Gemini Giant’ una frikada más de los americanos. Se trata de una escultura de un astronauta de 9 metros de altura con la que no podrás evitar hacerte una foto. El astronauta hace honor al programa GEMINI de la NASA que duró de 1962 a 1965 y en el cual se realizaron 19 lanzamientos.
3. La siguiente parada será en Braidwood. Allí te esperan varias réplicas de Elvis, Betty Boop o the Blues Brothers, junto a la cafetería Polk a Dot Drive In, que te trasladará a los años 60. Fue uno de los puntos de parada habituales en los años 50 y 60 y estos personajes eran clientes habituales y yo son fan de los Blue Brothers. Me encantó esta parada.

Por toda la ruta 66 encontraremos varias gasolineras antiguas e históricas, donde repostaban los gánsteres y que, sin duda, merecen una parada de foto. En este trayecto te aconsejo parar en la Ambler-Becker Texaca y Oil of Illiois Gas Station en Odell. Esta última, además, tiene una pequeña exposición, de artículos de la época, muy curiosa.
4. Nuestra siguiente parada fue Pontiac, donde se encuentra varios murales muy chulos.
5. Atlanta, es donde podremos fotografiarnos con otro de los gigantes fabricados en los años 60 para promocionar servicios de automóviles por toda la ruta. En esta ocasión nos encontraremos con Paul Bunyon Giant, el gigante con el perrito caliente, que desde 1965 y hasta el 2003 fue el reclamo de los hot dos del restaurante Bunyon .Este restaurante cambió el silenciador que llevaba en sus brazos por un perrito gigante.

Con tantas paradas llegamos de noche a Springfield, por lo que dedicamos la mañana del segundo día para recorrerla y conocerla. Springfield es conocida como «Tierra de Lincoln» por ser el lugar donde el 16⁰ presidente de los Estados Unidos vivió desde 1837 al 1861 (justo cuando fue elegido como presidente de los Estados Unidos). Además de pasear por el centro de la ciudad, donde se conservan varias casas típicas de finales del siglo XIX, entre ellas la del presidente Abraham Lincoln, también se puede conocer el Capitolio nuevo y el antiguo. Nosotros también nos acercamos al cementerio para conocer su mausoleo y cerca de este, aunque un poco escondido, dentro del recinto para ferias y exposiciones, se encuentra el gigante que rememora al presidente como hombre del estado de Illinois.

Springfield es la capital del estado de Illinois, el cual veníamos recorriendo desde Chicago. También es conocida como la cuna del corn dog o perrito empanado (salchicha rebozada en harina de maíz, frita y servida pinchada en un palito) que no debes dejar de probar, el mejor lugar es Cozy Dog Drive In, situado junto al mítico Route 66 Conference hotel donde nos alojamos. El hotel es muy básico y está bastante anticuado y descuidado, pero toda su decoración está ambientada en la Ruta 66 y el precio es de lo más económico de la ciudad.

Etapa 2: Springfield – St. Louis
Desde Springfield a St.Louis hay tan sólo 154 kms o 96 millas, así que te puedes tomar el día con calma o, como hicimos nosotros, dedicar la mañana para recorrer Springfield. Llegamos a medio día a San Louis, con tiempo suficiente para conocer una de las ciudades más grandes que hay entre Chicago y Los Ángeles.
Antes de entrar en la ciudad vale la pena desviarse (salida 3) y seguir la carretera 3 para conocer el puente Old Chain of Rocks Bridge. Puente histórico que une las dos orillas del río Misisipi y que, aunque antaño permitía el paso de vehículos, ahora es el más largo del mundo para peatones. Son casi dos kilómetros que merece la pena ser recorridos para disfrutar de un momento mágico y sentir el espíritu original de la “Ruta 66”.

Saint Louis es conocida sobre todo por el béisbol, el blues y el Gateway Arch. Este arco, que es el emblema principal de la ciudad está muy cerca del barrio Lanclede’s, así que puedes aprovechar para visitar ambos. Lanclede`s es un animado barrio, lleno de restaurantes y locales de ocio. Es el barrio donde se encuentran los antiguos almacenes del siglo XIX, donde se guardaba el algodón, tabaco y alimentos. Almacenes convertidos en restaurantes y bares donde merece la pena parar a tomar una hamburguesa. Gateway Arch es un elegante arco de 192m, existe un elevador que te lleva a lo alto y te proporciona unas magníficas vistas de la ciudad y del río Misisipi.

El arco representa la expansión de Estados Unidos y la entrada da acceso al museo situado junto a su base con exposiciones acerca de dicha expansión hacia el oeste. Está ubicado en el lugar donde el comerciante de pieles Pierre Laclede fundó la ciudad de San Luis en 1764. Desde aquí los exploradores Lewis y Clark comenzaron sus viajes de expedición por el río Misouri hacia el oeste, creando la ruta hacia Oregón y dando lugar a la gran migración hacia el oeste. Es la atracción principal de San Louis y merece la pena visitarlo, tanto por las increíbles vistas que ofrece desde lo alto, como por el maravilloso sistema de elevación que, recordemos, data del 1966. No apto para claustrofóbicos.


En la noche nos acercamos al barrio Soulars, muy recomendable si te apetece tomar unas cervezas y escuchar música en directo. En este barrio abundan los bares con conciertos de blues en directo, así que no te será difícil localizar uno. Nosotros estuvimos en Hammerstone, tomando unas cervezas y pasando un buen rato.
Etapa 3: Saint Louis – Springfield
Hoy continuaremos explorando la pintoresca región rural de Missouri, hasta llegar a la ciudad de Springfield, reconocida como el origen de la “Ruta 66” en 1926 y por ser cuna de Mark Twain. Tenemos 347 kms o 216 millas por delante nuestro, con uno de los paisajes más bonitos de la ruta, suaves colinas llenas de bosques de robles y típicas casas de madera con su porche y la mayoría con su mecedora, como en las películas.
Vuelve a tomar el control de tu coche, pon buena música y dirígete hacia Eureka. El día de hoy transcurrirá en gran parte paralelo a la I-44. Recuerda que durante toda la jornada irás paralelo a la autopista, unas veces a la izquierda y otras, cruzando puentes, a la derecha. Por eso mismo, no te fíes de los tiempos que te marquen los navegadores porque lo más habitual es que lo hagan en base a la autopista y presta mucha atención si no quieres salirte de la original «Mother Road».
Este día podremos visitar:
- Meramec Caverns, un lugar muy especial que lleva abierto al público desde 1933. Fue el refugio del conocido bandolero Jesse James y su banda, y hoy es una cueva de cinco niveles y 26 millas de espectáculo de estalactitas y estalagmitas.
- Cuba. Sí, sí, hay una Cuba en Misuri. Fundada en 1857 y conocida como la “ciudad de los murales”. Son murales muy bien conservados y la mayoría de ellos con la temática original y única de «la ruta 66».
- Haz una parada fotográfica en Fanning, donde se encuentra la segunda silla más grande del mundo, otra de las cosas friki de este viaje.
- Y por último haz una parada en Lebanon, donde podrás disfrutar del Museo de la Ruta 66 y el mítico Munger Moss Motel, que lleva dando alojamiento a los viajeros de la ruta 66 desde los años 40. Desde Lebanon te quedarán casi 90 kilómetros para llegar a Springfield. Llegamos a la ciudad para cenar y descansar. Esta noche aprovechamos a ver la película de Las uvas de la Ira para tener una buena introducir a lo que nos esperaba al día siguiente.


Etapa 4: Springfield – Oklahoma City
En los 460 kms o 286 millas de la cuarta etapa terminaremos de recorrer el estado de Missouri, atravesaremos el pequeño trozo por donde pasa la 66 por el estado de Kansas y entraremos en el estado de Oklahoma. La carretera sigue siempre paralela a la I-44, aunque en ocasiones desaparece y tendremos que tomar la interestatal. Si queremos seguir el trazado original tendremos que ir muy pendientes de las indicaciones durante todo el trayecto. El paisaje es de pastos verdes y está lleno de ranchos con muchas vacas y caballos.
- Nuestras primeras paradas de este día son dos encantadoras y conocidas gasolineras. Estas gasolineras son fantásticas y están llenas de historias, ¡te encantarán!
- La primera Gary Pay Gas, con un ambiente auténtico y varios coches antiguos. Una parada perfecta para nuestra primera foto del día y entrar en ambiente.

- Cars on the Route, para llegar a ella tendrás que desviarte unos minutos de tu camino, pero merece la pena. Es la mítica gasolinera en las que se inspiraron para la película «Cars» de Pixar. La conocerás fácilmente porque en la puerta hay varias camionetas iguales a las que aparecen en la película. Esta gasolinera se encuentra en la población de Galena y fue adquirida por cuatro mujeres que querían recibir la Route 66. En la película Cars 2 salen las cuatro, representadas por personajes. La calle principal de la ciudad de Galena o de varias ciudades por de pasamos hoy son auténticas, con casas y negocios a un estilo totalmente del oeste.


2. Rainbow Bridge, un puente blanco e inmaculado en el que no puedes dejar de hacerte una foto con el sello de la “Ruta 66” pintado en el pavimento. Pasado el puente pasamos por Baxtee Spring, lugar donde se produjo una masacre durante la Guerra Civil de Secesión y varios atracos a bancos.
3. Pasaremos por el centro de la ciudad de Miami, donde veremos el Coleman Theatre, de estilo Art Deco, bonito por dentro como por fuera. Acércate a la puerta, aunque esté cerrada, en el interior hay una encantadora señora que te abrirá y te lo enseñara por dentro.
4. Totem Pole Park, un tótem de 30 metros de altura muy curioso y repleto de detalles y del que se dice que es el más grande del mundo. En este mismo parque se pueden ver más tótems.

5. Pasamos por Catoosa, nombre que procede de los Cherokees, indios que habitaban en las tierras de Oklahoma y que significa «en la colina». Se trata de una ciudad portuaria, siendo el puerto interior más grande de Estados Unidos y que comunica Tulsa con New Orleans por el río Missippi. No encontraremos gran cosa en esta ciudad, sin embargo, aquí nos haremos otra foto con otro de las esculturas frikis que vamos viendo a lo largo de toda la ruta. Se trata de la Blue Whale de Catoosa, antiguo reclamo de un aquopolis ya cerrado, pero que ha permanecido para que los viajeros de las rutas nos hagamos una foto divertida.

6. Tulsa, la capital mundial del crudo, es una ciudad con bastantes edificios Art deco. Entre estos edificios destacan el Philcade Building con un espectacular vestíbulo y la Boston Avenue United Methodost Church. Nosotros hicimos una pequeña visita panorámica desde el coche, pasando por el Brady Arts District, ubicado alrededor de la Brady Street y Main Street y luego bajamos al Downtown para ver el Phicale Building y los edificios de alrededor. No merece la pena perder mucho tiempo en Tulsa, es bonito pasar por el centro para verlo, pero como hicimos nosotros, desde el coche y sin demorar mucho. De esta ciudad era Cyrus Avery el empresario que impulsó la creación de la ruta 66.
7. Desde Tulsa a Oklahoma aún quedan 105 millas y aquí encontraremos el tramo ininterrumpido más largo de la ruta 66. A medida que nos vayamos aproximando a Oklahoma la carretera se convertirá en la 77. Antes de entrar en Oklahoma nos paramos junto a la casa de John (Ok County 66-John’s Place), un señor muy dicharachero con un montón de cachivaches con temática en la ruta 66, con un curioso Volkswagen saliendo de la parte alta de la casa y varios coches que él mismo ha fabricado. Detente, aunque sea unos minutos para charlar con el hombre que es muy agradable y le gusta recibir a los viajeros de la 66. Tiene un montón de curiosidades a modo de museo y siempre está inventando algo.

8. A pocos minutos de la anterior parada volvimos a parar en una curiosa tienda de refrescos. Tiene cientos de botellas de sodas de los sabores más sorprendentes todos decorados con la marca de ruta 66. Si tienes sed, será tu parada perfecta.
Oklahoma
Oklahoma es una atractiva ciudad donde descansar de esta intensa etapa. El nombre de Oklahoma viene de la frase india «chocar okla humma» cuya traducción viene a ser «caras rojas». Es la ciudad de los cowboys y el country. Nosotros íbamos con ganas d bailar country y escogimos un hotel bien céntrico para poder disfrutar de una auténtica noche country. Hasta nos pusimos nuestros vaqueros y camisas de cuadros. Lamentablemente era martes y no encontramos bar con country, pero si un concierto de rock y dormir en el centro merece la pena.

Al entrar en la ciudad hicimos otra breve panorámica en coche pasando por el Paseo Arts District que es la zona más bonita de la ciudad, con una arquitectura colonial, repletas de bares y galerías de arte. También, pasamos por National Memorial Museum que recuerda el atentado terrorista más sanguinario de los EEUU que tuvo lugar en esta ciudad el 19 de abril de 1995. A las afueras se ve Field of Empty Chairs, representando 168 sillas vacías en recuerdo de las víctimas de dicho atentado.

Nos hubiera gustado visitar el National Cowboy & Western Heritage Museum, dedicado al «lejanos oeste» y a los cowboys, pero cierra a las 5 y no llegamos a tiempo para conocerlo. La verdad que el día de hoy había muchas cosillas por ver o donde parar y al final si sigues siempre el trazado original de la Mother Road las horas se te van volando y sin darte cuenta.
Nuestro hotel estaba al lado del Riverside en el Downtown. Hay un paseo en barco para recorrer esa zona, pero este día no funcionaba. Igualmente realizamos todo el recorrido a pie y no es tan largo, tardamos en hacerlo unos 40 minutos. Al final del paseo llegamos al impresionante conjunto escultórico que representa el momento en el que se fundó esta ciudad. Oklahoma se fundó en un solo día de la nada, el 22 abril de 1889. Fue una de las primeras carreras que hicieron los colonos para adjudicarse los más de 6,5 millones de acres de tierra que el estado de Oklahoma puso a disposición de los casi 100.000 aspirantes. Esta carrera se denominó la Harrison’s Hoss Race y fue inmortalizado en el cine en varias películas como en «Un horizonte Lejano» (Far and Away).


Etapa 5: Oklahoma City – Amarillo.
Hoy tenemos 418 km ante nosotros, en los cuales saldremos del estado de Oklahoma, para entrar en el estado de Texas. Los campos verdes de pasto y ranchos de Oklahoma irán transformándose en campos amarillentos de trigo. La carretera discurre en gran parte por la I 40, por lo tanto, aunque son casi los mismos kilómetros que en la etapa anterior, se va más rápido y sé tarda menos.
Las diferentes paradas que interesa realizar durante este día son:
- Route 66 Museo en Clinton. Uno de los museos más interesantes de esta ruta. Cada sala está dedicada a una etapa de la carretera desde el comienzo de su construcción hasta su abandono. Además en cada sala, se puede escuchar diferente música de la época. La entrada cuesta 7$.
- En Elk paramos en otro museo de la ruta: National Route Museum. En este caso no entramos, aunque hicimos una breve parada para fotografiarnos con la gigantesca señal de la entrada.

3. Otra paradita que merece la pena es junto al búfalo vestido de Sherif en Sayre. Queda una foto bien fotogénica.

4. City Meat Market o Sanhill Curiosity Shop es el edificio más antiguo de Erik y se trata de una tienda llena de un sinfín de curiosidades y trastos de la 66. Erik es la última población de Oklahoma y es un poco fantasma, no había nada abierto y la mayoría de negocios estaban abandonados.

5. Al pasar por Shamrock veras una antigua gasolinera, Tower Conoco Station. Se trata de un edificio muy Art deco y con algunas camionetas antiguas. Además, hay varios talleres con grúas y camionetas antiguas muy curiosas.
6. Antes de llegar a Amarillo tienes otra parada que no debes saltarte: The Big Farm. Se trata de una granja donde hay cinco Volkswagen Escarabajo semi enterrados los cuales se pueden pintar. Nosotros habíamos comprado por el camino los botes de Spray en una tienda Dollar y decidimos dejar nuestra huella en ellos. Es algo realmente divertido y que no hay que dejar de hacer.

Dormimos en Amarillo, no es una ciudad con un gran atractivo. Aunque, simplemente por cenar y vivir el ambiente texano del mítico restaurante The Big Texan vale la pena hacer una parada y dormir en ella. Según cuenta la historia, el restaurante se inauguró en 1959 por el propietario de una tienda, el cual estaba cansado de que todos los viajeros que pasaban por su tienda le preguntarán donde podían comer una rica carne tejana. Tenemos que tener en cuenta que Texas es una zona de grandes ranchos y abastece de carné a todo el país. De hecho, Amarillo es una de las mayores áreas empaquetadoras de carne de los EE.UU.

Este restaurante se ha hecho famoso, sobre todo, por su oferta de 2 kg de carne que se consiguen totalmente gratis si se es capaz de comerlo en menos de una hora. Según pone en el restaurante el récord está en 4 minutos y 20 segundos. Aunque no te atrevas con este reto, no dejes de entrar en él para disfrutar de su ambiente y probar alguna de sus deliciosas carnes. Te recomiendo que reserves habitación en Big Texas Inn. Este motel tiene la ventaja de estar pegado al famoso Big Texan Steak Ranch y sus habitaciones son muy bonitas, limpias y a un muy buen precio. De hecho, fue uno de los mejores alojamientos que tuvimos durante nuestro recorrido por la 66.

Etapa 6: Amarillo – Santa Fe
Este día se podría hacer parada para dormir en Tucumcari, pero nosotros decidimos avanzar para llegar a San Fe y así conocer esta maravillosa ciudad. La ruta 66 discurre casi todo el tramo por la Interestatal 40, por lo que los 452 km o 281 millas de esta etapa son rápidos y se llega perfectamente hasta Santa Fe. Recuerda que hoy entrarás en el estado de Nuevo México por lo que habrá que atrasar la hora.
Por el camino hicimos las paradas correspondientes de esta etapa:
- Cadillac Ranch. A poco de salir de Amarillo se encuentra el rancho donde hay 10 Cadillac plantados en la tierra. Aquí podrás divertirte gastando los botes de spray que utilizaste para pintar los Volfswagen en la última parada antes de entrar en Amarillo.

2. Midpoint of the Route 66. Se trata del punto que indica la mitad de la ruta 66. La pancarta nos indica que ya llevamos recorrido 1.139 millas desde que salimos de Chicago y que aún nos quedaban otras 1.139 hasta Los Ángeles.

Además, hay una cafetería muy auténtica con decoración del comienzo de la carretera 66 y con una gente súper amable. La cafetería se inauguró en 1928. Entra a tomar un café, la gente es realmente encantadora, incluso si no tomas nada te invitarán a que hagas fotos de la cafetería o si necesitas también puedes utilizar los baños sin problema.

3. Glenrio es uno de los muchos pueblos fantasmas que se pueden ver a lo largo de la ruta 66. A partir de Glenrio hay unas 20 millas sin asfaltar, que dan más autenticidad al viaje. En caso de que no te atraiga la idea de conducir por carretera de tierra o gravilla puedes tomar la I40 hasta la próxima salida en Tucumari. Recuerda que aquí ya estarás entrando en Nuevo México, por lo cual deberás cambiar la hora, a partir de aquí será una hora menos. Habrás ganado una hora para seguir recorriendo y conociendo.
4. Tucumcari suele estar considerada en la mayoría de las guías como el final de la quinta etapa de la ruta 66, pero se llega demasiado temprano y no hay demasiado que hacer aquí. Es preferible seguir y llegar a dormir a la bonita ciudad de Santa Fe. En Tucumcari hay más de 30 hermosos murales en las paredes de sus edificios, incluso algunos se encuentran en el interior de las cafeterías, como el del Dean’s Café. Aquí también se encuentra el mítico Swallow Blue Motel, del cual tengo un cuadro precioso, asique no pudimos evitar tomar miles de fotos en él. Si finalmente decides dormir en Tucumcari puede que te interese reservar en este Motel, se ve restaurado y muy bonito.

A la entrada de Tucumcari se encuentra una tienda de souvenirs con forma de tipi muy curiosa y con buenos precios.

5. Santa Rosa es otra de las paradas que se pueden realizar a lo largo de esta etapa. En ella se encuentra el Blue Hole y dependiendo de la época del año en la que realices el viaje, podrás darte un chapuzón en ella, aunque la temperatura del agua por lo visto siempre está a 60⁰F o, lo que es lo mismo, 16⁰C. Asique solo apto para valientes.
6. Santa Fe es la capital de Nuevo México. Además, es la capital de estado más antiguo del país, su fundación data del 30 de marzo de 1609. Es una ciudad muy cuidada, tanto que a veces parece un poco parque temático. Todas sus casas son bajas y de adobé. Su centro histórico está alrededor de la Plaza y la catedral de San Francisco y se recorre en poco más de una hora. Sorprende la cantidad de galerías de arte y bares con comida mexicana que hay en toda la ciudad.

Junto a la plaza se encuentra la Misión de San Miguel de 1640, una de las misiones más antiguas que formaban el Camino Real que iba a desde México al Norte de California. Estas misiones se construyeron a la distancia de un día de caballo una de otra para ir conquistando las tierras y adoctrinando a los indios en el cristianismo.
Etapa 7: Santa Fe – Albuquerque
Albuquerque está a tan sólo 64 millas o 102km de Santa Fe. Nosotros aprovechamos toda la mañana para conocer algunos pueblecitos ubicados a pocos kilómetros en el norte y que siguen siendo el corazón de la población indígena de Nuevo México. Se encuentran ubicados al sur de las montañas de Sangre Cristo y ofrecen un paisaje precioso con sus casas de adobé y las montañas nevadas. El paisaje es de película, bastante parecido a la Capadocia. Hicimos una ruta circular parando en los siguientes puntos:
- Poeh Museum & Cultural Center, Un museo donde aprender más sobre la cultura India, con cerámica, pinturas y joyas.
- Santuario Chimayó. Era viernes de pascua y había una romería o peregrinación hasta el santuario, por lo que vimos a cientos o miles de peregrinos, en su mayoría mexicanos, y algunos con cruces a cuesta haciendo la subida hasta él. Fue algo curioso de ver. Llegamos al santuario muy despacio, siguiendo toda la fila de coches y de gente caminando. Una vez en el santuario fue impresionante ver la enorme fila que hacían los fieles para frotarse con tierra bendita, que según dicen tiene propiedades milagrosas.
El santuario es una pequeña capilla de adobé con dos torres y el interior con techo de madera e imágenes muy naifs. La verdad que nos gustó mucho, muy bonito por el entorno donde se encuentra y porque justamente le visitamos el día en el que 30.000 peregrinos caminan hasta él. Es el mayor peregrinaje católico de EE.UU.


3. Pasamos por Española con algunos murales bonitos, aunque tampoco muy destacados, para llegar a San Idelfonso, que fue el hogar de María Martínez, quien recuperó la tradición de elaborar la cerámica tradicional «negro sobre negro». La sorpresa fue que al llegar al desvío de la carretera que nos llevaba hasta el pueblo, ponía que el pueblo estaba cerrado y no se podía entrar. Nos pareció rarísimo. Intentamos acceder por otra calle de tierra, dejando el coche y caminando unos 800 metros, pero igual, calle cortada y no pasar y carteles muy intimidadores en las casas por las que pasábamos:

Por lo que desistimos y continuamos nuestro camino hacia Albuquerque. Ciudad más grande que Santa Fe. Su casco histórico es bastante parecido a la capital de Nuevo México. Entramos en un supermercado en busca de cervezas para nuestra nevera y terminamos comiendo en él, auténtica comida mexicana y súper económica. Si vas buscando cervezas ya sabes, acércate aquí, la clientela y el personal son todos mexicanos y la comida preparada es deliciosa. Hay mesas en el interior para sentarse a comer.
Si eres seguidor de la serie Breaking Bad tienes que saber que fue en esta ciudad donde se rodó. Hay una ruta organizada que recorre los principales lugares más famosos de la grabación. Destaca el Java Joe’s café, utilizado como cuartel general de Tuco, que Heisenberg hace saltar por los aires mientras negocian. Nosotros lo visitamos para cargar fuerzas antes de continuar con nuestra séptima etapa de la ruta 66 y sirven un delicioso, abundante y económico desayuno.
En la noche nos acercamos al bar Bourbon & Boots donde escuchamos y bailamos música country. Un lugar muy recomendable para pasar una estupenda noche. La gente es súper amable y terminamos con nuevos amigos. Una de las noches más divertidas de toda la ruta 66.
Etapa 8: Albuquerque – Holbrook
Es una etapa de 233 millas/375 kilómetros donde encontraremos lugares muy bonitos donde sacarnos fotos y el primer parque nacional que visitamos en esta ruta. Los lugares que no te puedes perder el día de hoy son:
1. Grant. Primera parada en un pueblo de origen minero, aquí se extraía uranio. Nosotros paramos para hacer una bonita foto con el letrero luminoso que queda muy original con nuestro coche debajo.

2. Continental divide. Punto que divide el agua de lluvia que cae en el país. A la izquierda de este cartel el agua se irá para el Pacífico y el que caiga a la derecha va para el Atlántico. Además, hay una tienda con cositas indias muy interesantes y de las más económicas en artículos indios que encontramos a lo largo de la ruta.

3. Gallup. Es una de las ciudades más conocidas de la ruta 66, se extiende a lo largo de la avenida 66 y en ella se encuentran varios restaurantes y moteles históricos, como el restaurante Shiwi Trading Center de 1928, el Drake Hotel de 1919 o en El Rancho Hotel que ha dado alojamiento a un sinfín de artistas. Merece la pena entrar en este último hotel, para admirar su decoración y ver las fotos de todos los artistas que han pasado por él.

4. Al pasar Lupton estaremos entrando en el séptimo y penúltimo estado por el que pasa la ruta: Arizona. Además, nos estaremos adentrando en el Navajo Indian Reservation. Esta reserva tiene una superficie de 43.452km² y es más grande que algunos estados del país. Se ubica entre los Estados de Arizona, Nuevo México, Colorado y Utah y es el lugar de los Dinamarca (navajos), la tribu india más grande de EE.UU. Al entrar en Arizona volveremos a ganar una hora y tendremos que atrasar nuestros relojes una hora. Arizona y toda la reserva India de los Navajos (incluido el Parque del Monument Valley a pesar de estar en el estado de Utah) tienen la misma hora del Pacífico durante el verano (hora de California) o la misma hora del centro (Nuevo México) en invierno. Ellos no cambian el horario.
5. Visita al Parque Nacional Petrified Forest. Es un parque nacional, por lo que si luego vas a visitar algún otro parque más como el Gran Canyon, el Zion o el Bryce, como hicimos nosotros, te merece la pena comprar el ticket anual con el que tendrás acceso a todos los Parques naturales del país. En este se puede ver una de las concentraciones más grandes del mundo de madera petrificada.

Para visitarlo toma la salida 311 de la I-40. El parque es atravesado por una carretera que va a desembocar a la 180 y que nos llevará directamente a Holbrook, donde haremos noche hoy. A lo largo de los 45 km (28 millas) de la carretera que cruza todo el parque se encuentran los nueve miradores con vistas increíbles a un paisaje tan rojo. Hay dos senderos que no debes dejar de realizar: el paseo de por Blue Mesa de unos 2km, que irá pasando por hermosas montañas de colores azul y blanco con forma de tipi y el paseo por Jasper Forest donde se encuentra la mayor concentración de árboles petrificados. Una auténtica maravilla.

6. Holbrook. Nos quedamos aquí porque queríamos dormir en el mítico Motel de los tipis: Wigwam Hotel. Es un encantador Motel que tiene sus habitaciones en forma de tipi y le dan un aspecto muy auténtico del oeste. Holbrook no tiene nada especial y después de haber visto Flagstaff o Williams, re recomiendo dormir en cualquier de estos dos pueblecitos con mucho más ambiente y mucho más bonitos que Holbrook. Compramos en el supermercado que hay frente al Wigwam e hicimos pic nic en la noche. El supermercado tiene de todo, pero el Motel no tiene ni microondas, ni cafetera. Es bonito, pero demasiado básico para el precio. Habitación 96$.

Etapa 9: Holbrook – Willians – Grand Canyon
Si piensas visitar el Gran Cañón, te interesa levantarte pronto este día y entretenerte lo justo por el camino, porque el Gran Cañón es una de las principales maravillas naturales del mundo y merece la pena llegar con tiempo y aprovechar para ver el atardecer desde él. Pero no te olvides de ir haciendo las paradas reglamentarias de la ruta 66, que para eso estamos aquí.
1. Jack Rabbit Trading Post. Es otra de las paradas míticas de esta etapa, se trata de nuevo de una tienda de souvenirs. Aunque no vayas comprar nada, como nosotros, al menos merece la pena la foto con el conejo gigante que tienen en la puerta.

2. Winslow, Standin’ on the Corner Foundation. En la calle principal se encuentra una escultura de una persona esperando en la esquina que hace referencia a la canción de los Eagles: «Take it Easy». Justo detrás también podemos ver un mural, donde se ve la silueta de una mujer. Es bastante curioso, pero antes de llegar apréndete la canción para cantarla a pleno pulmón al llegar, jejeje, ¡algo muy divertido!.

3. Cráter Barringer. Esta parada se encuentra a 4 millas retirada de la ruta, nosotros la hicimos, aunque la entrada para conocer el cráter nos pareció algo cara: 24$ por persona. Se trata de un cráter de 1,2km de diámetro y 570m de profundidad producido por el impacto de un meteorito hace unos 50.000 años. Tiene un interesante museo y las dimensiones del socavón son impresionantes.

4. Flagstaff y Williams. Son dos pequeños pueblos de apenas unos 3.000 habitantes cada uno, pero sin duda son de las aldeas más animadas y con más movimiento que vimos a lo largo de los 4443km de la ruta 66. Una vez conocidos, pensamos que hubiese sido una buena idea pasar una noche en alguno de estos dos encantadoras pueblos. ¡Demasiado tarde para nosotros!
Ambos tienen el mismo trazado urbanístico, una calle principal a lo largo de la cual se encuentran los diferentes moteles, tiendas de souvenirs y, en este caso, innumerables restaurantes típicos y bien conservados de la época de cuando comenzó a construirse la ruta. Hay varios bares con mobiliario de la época 50, como el Twister 50’s de Williams. Otro de los atractivos de Williams es que desde aquí parte el Grand Canyon Railway, un tren de 1880 que te lleva hasta el centro de visitantes del Parque Nacional del Gran Cañón.

Nosotros aquí realizamos un «kit-kat» de 6 días para recorrer los diferentes parques Naturales y disfrutar de dos noches en Las Vegas. Es una parada muy recomendable de realizar, un cambio muy radical de paisaje y en general del viaje en sí. Si puedes y tienes tiempo no evites este desvío y disfruta de algunos de los lugares más increíbles de todo el planeta, como puede ser el Grand Canyon, el Antilope o el Monument Valley. Si quieres saber cómo hicimos, entra en mi artículo: Las Vegas y los Parques Naturales a visitar en una sema.

Etapa 10: Gran Canyon – Seligman – Kingman
Este día retrocedimos para retomar la mítica ruta 66 de nuevo. Después de 6 días por Las Vegas y por los Parque Naturales cercanos a Las Vegas continuamos nuestro recorrido la 66 hasta Kingman. Volvimos otra vez a las fotos de gasolineras antiguas y ranchos llenos de curiosidades y cachivaches haciendo honor a la Mother of the Routes.
Nuestra primera parada fue en Seligman. Ya habíamos estado en esta pequeña ciudad cuando hicimos el recorrido por el oeste americano y nos encantó regresar de nuevo a ella. Aprovechamos para comer una riquísima hamburguesa en Delgadillo´s Snow Cap Drive-in, toda una institución dela Ruta 66, con un divertido ambiente bromista. Es un pequeño pueblo que vive por y para la ruta 66, lleno de tiendas, cafés e, incluso, talleres de coches ambientados en la época en que la ruta pasaba por aquí.

Dormimos en Kingman, ciudad fundada en 1880. Ciudad tranquila, pero muy agradable para recorrer su centro, donde encontraremos una antigua máquina de vapor. Como curiosidad, os cuento que el nombre de la ciudad le fue dado por Lewis Kingman, quien fue el encargado de controlar la construcción del tren entre el Atlántico y el Pacífico. Este tren pasaba por Kingman e hizo que está ciudad creciera y se desarrollará. sobre todo, durante la Segunda Guerra Mundial y el periodo de la Gran Depresión.

Dormirmos en Best Western Kings Inn que está muy bien y se encuentra cerca de uno de los restaurantes más famosos de la ciudad. El Dambar Steakhouse es un lugar con buen ambiente y con buena carne. Ideal para cenar y pasar un buen rato entre los cow boys de los ranchos de alrededor. Kingman es un buen lugar donde parar a descansar después de haber retomado la Ruta 66.
Etapa 11: Kingman – Santa Mónica
Esta es nuestra último día de la Ruta 66. Tendremos sensaciones encontradas. Por un lado, ya tendremos ganas de llegar al final de la ruta, de tacharla en tu lista de «cosas por hacer una vez en la vida«, pero por otro lado, tendremos la tristeza de que se acabó, de dejar atrás esta increíble carretera, con todo su polvo, sus coches viejos, su mucha chatarra y sus muchos cachivaches. Todo esos lugares frikis en los que hemos ido parando y nos hem0s ido retratando como si del mismísimo Taj Mahal se tratase.
Bueno, dejamos la melancolía de lado y vamos a ver lo que nos depara nuestra última etapa de la Ruta 66. Saliendo de Kingman iremos durante el primer tramo por la carretera original, bastante estrecha, y con muchas curvas, atravesando un paisaje desértico fantástico.
- La primera parada la vamos a hacer en Outman, un antiguo pueblo minero. Es un pueblo totalmente al estilo western, de hecho, a servido en numerosas ocasiones como escenario para este tipo de películas. Llaman la atención la cantidad de burros que hay paseando libremente por su calle. Se trata de los descendientes de los utilizados por los mineros a comienzo del siglo XX, cuando Outman era tan solo un campamento de tiendas de campaña que alojaba a los miles de hombres llegados de toda América en busca del añorado oro.


2. La segunda parada será ya en el estado de California, el tercer estado en extensión de los Estados Unidos. California fue colonizada por España en el siglo XVI y perteneció a México desde 1769 hasta 1850, cuando definitivamente pasó a ser el estado número 31 del país. Haremos una breve parada en el famoso café Bagdad. Este café se hizo famoso a raíz de la película homónima de los años 80. A pesar de estar cerrado, la dueña estaba fuera y nos permitió entrar a conocerlo. Nos desilusionó mucho verlo tan dejado y poco cuidado. El interior estaba completamente sucio y prácticamente abandonado, había tuberías rotas y olía fatal. Nos dio mucha pena.

3. Por el camino encontraremos el original Peggy Sue’s Dinner 50’s, ideal para parar a comer. Su mobiliario es original de los años 50, hay esculturas de los Blues Brothers, Betty Boop, Elvis y otros míticos de esta época. Además, la comida típica americana será servida por camareras en uniforme de los años cincuenta, muy graciosas.
4. El pueblo fantasma de Calico. Es otro pueblo minero abandonado que ha sido restaurado y abierto a los turistas para poder ver como fueron estos poblados surgidos alrededor de la fiebre del oro. Se cobra una entrada de 8$ por persona. Nosotros no llegamos a entrar, ya habíamos visitado Outman y nos había parecido tan auténtico que no nos interesaba un escenario restaurado.
5. Donde sí paramos fue en Elmer’s Bottle Tree Ranch. Un lugar muy friki, ya echábamos de menos volver a ver otra frikada de estas americanas. Es un rancho lleno de árboles formados por centenares de botellas de todos los colores.

Finalmente llegamos a Los Ángeles, la meca del cine. En esta ciudad pasamos otros dos días para recorrer sus calles, como la famosa Hollywood Blvd, donde además de las estrellas con los nombres de artistas del cine, música y teatro, también se encontraba nuestro motel. Aunque lo primero que hicimos fue llegar hasta Santa Mónica donde dimos por concluida nuestro recorrido por la Ruta 66. En Santa Monica Pier encontramos la señal que dio punto y final a este hermoso recorrido de 20 días. Un viaje inolvidable, lleno de risas y momentos memorables.

Espero que te haya gustado nuestro recorrido y, sobre todo, que te inspire y te anime a lanzarte a la carretera. No lo dudes, es un viaje entrañable que te permitirá conocer en profundidad los Estados Unidos. Desde Los Ángeles podrías continuar para terminar en San Francisco, una de las ciudades más bonitas de este país, o simplemente dedicar unos días para descansar al sol en las playas de Santa Mónica y asimilar todas las experiencias vividas en La Madre de todas las rutas: La Ruta 66.
Increíble viaje!!
Gracias por el Blog, está genial 😊